Ashtanga no es para perezosos (Y no!)

Claramente uno de los pilares de la práctica del yoga es el de la constancia.

No hay yoga sin constancia como no hay práctica sin compromiso y es que como si esto fuera poco, una fue jusssssto a caer al ashtanga vinyasa yoga que no sólo demanda constancia sino que, para la cartera de la dama o el bolsillo del caballero: exige disciplina y repetición.

Y repetición. Y repetición.

Las posturas de ashtanga serie primera o bien denominada «Yoga chikitsa» (yoga de la desintoxicacion o terapia) es la de utilizar una secuencia de x cantidad de posturas que van encandenadas entre si, o sea que de la a), debes pasar por la b) (y pasar quiere decir hacerla corectamente, algo que no sale siempre a primeras intenciones y se pueden tardar años en completar una postura!) y asi sucesivamente hasta que finalmente se complete la 1er. serie de las seis (6) series que componen esta práctica, como para que te imagines es como aprender a escribir y a leer: primero aprendes las letras, luego las unís y luego las lees y siempre con la guia de un maestro.

Se dice que se completa la 1er. serie en aproximadamente 7 años que es lo que demora el cuerpo en «desintoxicarse».

¡¡Siete años!!

¡Sie-te-a-ños!! Y si practicás todos los días menos los de luna llena y sabados (así es el calendario de practica tradicional de su fundador)

OK, no es que me esté quejando pero si a ud. le «dá fiaca» ir a una clase de yoga aunque sepa de memoria y pueda repetir como loro de organito los beneficios que trae consigo practicar yoga,  los ashtanguis nos enfrentamos con que tenemos que girar como hamsters en una rueda eterna que no avanza, una secuencia repetitiva una y otra vez.

Y una y otra vez. Y otra vez. Hamster-rueda. Ashtangui-mat-Hamster-rueda

Toodo esto se perpetua en el tiempo hasta que uno se encuentra apto para «avanzar» en asana hacia algo «nuevo» y es acá donde o te enamorás o huís a una clase de Kundalini (no es por bardear, ojo).

Cuando practico siento que entro en un secuencia coreografica de tango y me imagino que luego de tal postura, viene otra y así sucesivamente, claro que bailar tango no es doloroso (tan doloroso), bueno, al menos no siento ese dolorcito que soportás con una sonrisita masoquista que todos los que practicamos ashtanga tenemos o ponemos cuando ese musculo se teeeeeeeeensa al límite o cuando la piel de la espalda tiiiiiiiiiiiiira, o los brazos, o las manos y es que (honestamente) si no se sintiera ese «dolorcito placentero saludable» yo creo que no hubiera abrazado el ashtanga, yo creo que si  no me debatiera por controlar mi respiración constantemente corta, que si no sintiera como me prendo fuego desde dentro hacia afuera, nunca jamás hubiera sostenido la práctica con el amor y devoción que la sostengo (ponéle).

Practicar yoga es maravilloso, cantar mantras, meditar, todo es un potente «kit de limpieza espiritual toda superficie» aún para quienes no cazan un soto de técnicas de pranayama, mantras, historia, religiones,. es imposible no ir lentamente como un niño dentro de un parque de diversiones queriendo «probar todo» cuanto te aporte a tu mejora: oia, y mirá que interesante este curso de gemoterapia?, opa, ¿que lindo esa reunión de mantras, y mirá aquel evento de meditación!, quiero ese curso de biomecánica y pranayama!, anotáme al de cuencos tibetanos que me duermo y vuelo!

Sisi, te vas enganchando en todas y de repente andás por la vida con una mat enrollado en la espalda 🙂 porque «una nunca sabe» o tenés uno en casa y uno en la shala donde practicás jijiji, o un  mat ultra liviano para viajar y otro gordito para casita ❤

La práctica de ashtanga demanda un alto compromiso, en mi caso lo asocio con ese nivel de compromiso que «me cuesta sostener» y ando errante todavía pensando si comienzo acá o allá o si practico en casa (hasta que me acuerdo que estilo mysore en casa me torra y me disperso todo el tiempo por todo!) y recuerdo que tal vez la practica de ashtanga no es como las demás practicas, no es como cuando estudio algún libro interesante sino que exige mi presencia en carne y hueso sobre un mat, dos veces minimo por semana.

Como dijo su fundador Sri K. Patthabi Jois «Ashtanga is for everyone except for lazzy people» (Ashtanga es para todos excepto para gente perezosa)

Firma: Viviana la practicante Lazzy